El entorno actual y la globalización de la economía mundial, obliga a las empresas a la diferenciación en el mercado, constituyéndose ésta como un elemento clave para el crecimiento de dichas empresas y del fortalecimiento del tejido empresarial. La creación y el desarrollo de las marcas, se convierte, por tanto, en elemento estratégico para el progreso, económico, tecnológico y social de un país. Por tanto, se hace necesario la existencia de un marco legal jurídico que apoye y ampare su gestión, así como que identifique las principales dificultades y necesidades del sector.
La armonización de la normativa europea que se produce con la entrada en vigor del Real Decreto-ley 23/2018 de 21 de diciembre, no sólo introduce algunas novedades relativas al registro y gestión de las marcas, o conceptos tales como marca notoria o renombrada, o atribuciones a la Oficina Española de Patentes y Marcas a partir de 2023, sino que da un paso más, por ejemplo, en la lucha contra las falsificaciones, confiriendo a los titulares de marcas de cualquier Estado Miembro, la facultad de ejercitar su derecho como titular contra mercancías procedentes de terceros países que utilicen signos idénticos o virtualmente idénticos al de su marca registrada.